El crowdsourcing es una de las herramientas colaborativas más potentes que han surgido en estos últimos años gracias, entre otras cosas, a la democratización de Internet. Mediante ella, varias personas pueden ofrecer tanto ideas como servicios para disminuir la carga de trabajo de una empresa, ya que sus aplicaciones son muy amplias.
Por ejemplo, pueden abarcar desde la creación de un logo hasta la implantación de una campaña publicitaria. La mecánica es realmente sencilla, pues se trata de acceder a una plataforma, publicar la convocatoria y, finalmente, comenzar a recibir diferentes ofertas de los interesados en el proyecto.
Si quieres saber más sobre esta práctica, descubrir en que consiste, sus tipos principales, así como algunos ejemplos para implementarlo e incluso para ganar dinero, sigue leyendo porque seguramente este artículo sea de tu interés 😉
En qué consiste el crowdsourcing
El crowdsourcing es una forma de externalizar, así como delegar, ciertas tareas por parte de las empresas. El objetivo es dejar algunos proyectos en manos de una comunidad o grupo de personas.
Este grupo está formado por profesionales de cada sector capaces de presentar una serie de propuestas, candidaturas y diversas ideas de cara a cubrir dicha tarea de la mejor forma posible.
Las empresas que hayan optado por esta propuesta, se encargarán de elegir a aquellas personas aptas para realizar el trabajo y capacitadas para resolver problemas y ayudar al desarrollo del negocio que les ocupe, normalmente (por no decir siempre) a través de ideas frescas e innovadoras.
Objetivos de esta práctica
Dentro de los objetivos principales del crowdsourcing destacan los siguientes:
- Desarrollar las tareas necesarias en menos tiempo a través de resultados más eficaces por el aumento de la mano de obra.
- Aumentar el negocio gracias a la aportación de soluciones rápidas e ideas innovadoras.
- Externalizar proyectos dejando paso a nuevas soluciones desde un punto de vista diferente.
¿Cómo se beneficia la comunidad?
Aquellas personas elegidas para llevar a cabo las tareas por parte de las empresas, se beneficiarán de forma material, económica y en algunos casos laboral, por haber dado soluciones y soporte al aumento de la demanda en un momento determinado.
De este modo, se busca refrescar el talento que ya existe dentro de una empresa dando la oportunidad a profesionales externos de incluir su punto de vista en algunos procesos.
Crowdsourcing: el origen de este concepto
El crowdsourcing como concepto apareció en el año 2006. Fue Jeff Howe, periodista y editor en la revista Wired, quien se encargó de acuñarlo y darle un nombre determinado a través de uno de sus artículos.
En el mismo, Howe nombró esta nueva herramienta colaborativa, añadiendo información sobre cómo se fue fraguando la aparición del fenómeno. De acuerdo a sus palabras, este concepto supone una externalización de una tarea para que un grupo numeroso de personas, indefinido, pueda realizarla a través de una propuesta abierta.
Se puede llevar a cabo tanto de forma colaborativa como individual, de acuerdo a las necesidades que se precise cubrir en cada uno de los casos concretos.
El nombre en particular aparece debido a una contracción y neologismo de “crowd”, que significa masa de gente, y la palabra “outsourcing”, traducida como externalización.
¿Para qué sirve esta herramienta?
En la actualidad, el concepto de crowdsourcing se ha convertido en una de las herramientas colaborativas más dinámicas que pueden usar las empresas gracias al sistema de organización. En este sentido, también destaca el que se puede usar para cubrir una amplia variedad de objetivos según el proyecto que se deba llevar a cabo.
Por ejemplo, la empresa se puede beneficiar de forma directa tanto de la contribución como de la opinión de una audiencia clave, como puede ser el público objetivo.
Entre otras cosas, se puede usar para crear votaciones, encuestas, lluvias de ideas, contribuciones en cuanto a la planificación estratégica de un proyecto o el diseño de nuevos productos que introducir en el mercado.
Usos principales del crowdsourcing
Entre los usos principales del crowdsourcing de esta herramienta destacan los siguientes:
- La posibilidad de crear encuestas para lograr un acercamiento a los potenciales clientes. A través de las mismas, se puede conocer la opinión de los mismos sobre los productos ya existentes y sobre otros que podrían lanzarse en el futuro.
- La solución de problemas gracias a la colaboración abierta distribuida en convocatorias dirigidas a una comunidad de profesionales. Así, se obtienen resultados más eficaces en menos tiempo.
- La innovación a través de la creatividad de ideas diferentes y frescas que provienen de una comunidad completa y no solo de una persona específica.
Tipos de crowdsourcing principales que debes conocer
Así como existen diferentes usos, con el tiempo también han aparecido distintos tipos de crowdsourcing, tal y como los definió Jeff Howe.
👉 Crowdfunding, financiación colectiva
El crowdfunding es un modelo a través del cual los individuos aportan dinero de forma altruista. Suele emplearse para llevar a cabo proyectos sociales o con carga humanitaria.
👉 Crowdcreation, la creación colectiva
El crowdcreation trata de obtener la colaboración de la comunidad relacionada con ideas o propuestas de carácter creativo. Las ideas deben ser innovadoras y eficaces en cuanto al desarrollo de los productos y servicios a través de la aportación de valor.
👉 Crowdlending, otra forma de financiación
El crowdlending consiste en la posibilidad de las empresas de financiarse a través de un grupo numeroso y diverso de personas que prestan pequeñas cantidades a cambio de un retorno financiero.
👉 Crowdlearning, para aprender de forma colectiva
Por otro lado, el crowdlearning consiste en poner el aprendizaje al servicio de todos por parte de la comunidad. Su máxima se coloca en torno a que todos los individuos tienen conocimientos suficientes que pueden compartir con el resto de miembros.
👉 Crowdvoting, una votación en comunidad
A través del crowdvoting se puede conocer la opinión de una gran cantidad de personas sobre un tema determinado a través de una votación colectiva. Se pueden llevar a cabo, por ejemplo, a través de las redes sociales.
👉 Crowd wisdom, el conocimiento colectivo
Esta herramienta consiste en usar y aprovechar el conocimiento que tiene una comunidad con el objetivo de conseguir resultados de forma inteligente. Se pone en marcha a través de la consulta sobre un tema a un grupo con experiencia en el mismo.
A pesar de que estos son los tipos definidos por Howe, conforme han ido pasando los años también se han ido añadiendo otras variedades. Algunos ejemplos son el crowdshipping o el crowdspeaking, entre otros.
Ejemplos de crowdsourcing para aplicarlo en la práctica
Como ves, son muchos los tipos y usos de esta herramienta por parte de las empresas. Si quieres conocer cómo se lleva a cabo en la práctica, debes conocer algunos de los ejemplos más conocidos.
1️⃣ El método de la empresa LEGO
LEGO cuenta con esta herramienta para que sus clientes compartan ideas relacionadas con sus productos con el resto de la comunidad. Su objetivo es que las ideas sean comentadas por el resto de miembros y, si una propuesta consigue diez mil o más seguidores, es evaluada por parte de la organización.
Cuando el producto se puede llevar a cabo, la empresa recompensa a los participantes con el 1% de regalías por las ventas que se generen.
2️⃣ McDonald ‘s también la ha llevado a cabo
En Reino Unido, McDonald ‘s decidió usar esta herramienta para proponer que el público creara una nueva hamburguesa.
De las hamburguesas creadas por los usuarios, que también daban nombre a su propuesta, se eligieron cinco y se ofrecieron durante un tiempo limitado en los restaurantes.
3️⃣ La propuesta de Adidas
La marca llevó a cabo una exitosa campaña de crowdvoting a través del evento Adidas Crowdsourced Fashion Show, presentado en la semana de la moda de Nueva York.
Fueron los usuarios de Twitter quienes lo diseñaron votando tanto por la música como por la iluminación y otros detalles, convirtiéndolo en un éxito.
4️⃣ El caso de Marc Jacobs
Marc, una de las marcas de la empresa, eligió modelos para su nueva línea de forma diferente. Para hacerlo, llevaron a cabo una convocatoria por redes sociales, en Twitter e Instagram, en la que el público podía participar.
Lo hicieron a través del hashtag #castmemarc y se unieron 70 mil personas. De ellas, 30 fueron seleccionadas para ir a Nueva York y 9 consiguieron participar de forma activa en la campaña.
Cómo se relaciona con el marketing digital
Las redes sociales se han convertido en una de las herramientas clave del marketing digital. A través de ellas, las empresas pueden llegar a su público objetivo de forma sencilla, por lo que el crowdsourcing funciona como el complemento perfecto para una campaña efectiva.
La marca tiene la capacidad de conectar con su comunidad a través de las redes y estas pueden amplificar el alcance de cualquier implementación de esta herramienta colaborativa.
El resultado es un aumento en la interacción, así como la solución a problemas específicos que puedan surgir preguntando de forma directa a quienes les interesa.
Además, de este modo, se consigue aumentar la confianza del público, que tiene la oportunidad de aportar soluciones creativas y trabajar codo con codo con la marca, obteniendo ésta un aumento en su visibilidad.
Ventajas y desventajas del crowdsourcing
El crowdsourcing supone una gran herramienta para obtener múltiples beneficios por parte de las marcas. Descubre las ventajas de llevar a cabo este tipo de procedimientos:
- La empresa reduce esfuerzos y costes debido a la externalización.
- Aumenta su capacidad de innovación, pues la comunidad a la que se dirigen los proyectos cuenta con candidatos ilimitados e ideas creativas.
- Se acaba con las barreras en cuanto a la financiación.
- Obtienen un extra de objetividad gracias a la visión externa.
Asimismo, también existen algunas desventajas que debes tener en cuenta relacionadas con el crowdsourcing:
- Quienes realizan las tareas no tienen una relación de confianza con la empresa.
- Puede haber problemas en cuanto a la propiedad intelectual así como en cuanto a los salarios, que podrían estar fuera del mercado.
- Podrían existir diferencias entre los objetivos de la marca y la forma de trabajo de quien lleva a cabo la tarea.
- Los incentivos deben ser superiores para alcanzar la efectividad.
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